Todo lo que no podes dejar atrás

Hoy toca U2 en la Argentina. Mi hermano fue fan de U2 desde la más tierna infancia. Aunque a mí me gustaban mucho algunos temas, nunca los seguí con demasiada atención. Pero su música se grabó en mi memoria y forma parte de la banda de sonido de mi niñez. En ese sentido, la inconfundible, potente voz de Bono logra, por momentos, conmoverme hasta las lágrimas, mucho más allá de cualquier consideración racional.

What you got, they can't steal it/ No, they can't even feel it / Walk on.

2 comentarios:

  1. Anónimo31 de marzo de 2011, 8:16

    La música, al igual que la fe o el amor, no exige consideraciones racionales. En sus mejores momentos, esta banda me hace pensar en una frase que alguna vez escuché: "Entendí el significado de alma, o espíritu, escuchando a los Beatles". Cínicos abstenerse.

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  2. nicolás schuff31 de marzo de 2011, 8:30

    ¡Decíselo a Teodoro W. Adorno!

    Por consideraciones racionales me refería a que algunos temas me conmueven por motivos que exceden a su, digamos, calidad intrínseca.

    Pero como dijo alguien que puede haber sido Zappa o Theloniuos Monk, refiriéndose a los críticos: "Hablar sobre música es como bailar sobre arquitectura".

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