Como es bien sabido, los elefantes, para bajar de los árboles, se suben a una hoja y esperan que llegue el otoño. Ahora que el verano se alarga, los paquidermos deberán aguardar un poco más de la cuenta. Así que si divisan alguno en un árbol de su calle, no dejen de darle charla, facilitarle un poco de maní, cantarle ópera –hacerle, en fin, un poco menos aburrida la espera.
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si el elefante tiene coronita, no le canto nada ni le convido maní. a mí, con monarquía, pfff!
ResponderEliminarpero cuánta intolerancia, mujer. entre los suyos no usan coronita porque esas orejas se lo impiden. pero le pido que respete la autodeterminación de los pueblos, caracho.
ResponderEliminary en última instancia, si se mantiene en sus trece, tenga la deferencia de ponerme al tanto si avisora un paquidermo en las cercanías de su hogar. ya me ocuparé YO de atenderlo.
la autodeterminación de los pueblos está muy bien, así deben ser las cosas, pero no me obligue a que me gusten la coronitas: no me dan ganas de cantarles ni hacerles el aguante ni nada.
ResponderEliminarsi el paquidermo no tuviera o tuviese coronita, yo le canto, le prometo.
¿o tienen todos coronita? si así fuera, tal vez eso no es monarquía, o es una plurimonarquía y son todos reyes, y ahí ya cambian las cosas...
¿ve que no es intolerancia? además entre los suyos tampoco usan coronita... ¿o se la ponen sobre las gorras?
está bien, estimada. yo creo que es un adorno, nomás. ¿no vio que bajo la coronita usa un ambo verde? es un elefante coqueto, un elefante elegante.
ResponderEliminarnoooo, Babar es el rey de andeveras; Brunhoff no resiste el menor análisis:
ResponderEliminarhttp://es.wikipedia.org/wiki/Babar
¡archivista!
ResponderEliminareste está en mi estante desde que tengo 4:
ResponderEliminarhttp://www.annuaire-enfants-kibodio.com/livres/babar-et-le-professeur-grifaton_9782211090483
¿Y que tal estos ?
ResponderEliminarhttp://www.barbapapa.fr/
¡Me había olvidado de esos... "cosos"!
ResponderEliminarja, no sabia como nombrarlos, esos "cosos medio pegajosos como babosas que se pueden transformar en lo que quieran "
ResponderEliminarPero que lindo era leer sus libros, quiero el que yo tenia de niña y no lo encuentro...
Los Barbapapá son lo más. Me enloquecían de chica los dibujos esos, y los de Babar también, no voy a mentir. Nat me regaló un Barbapapá hace poco, alguna muestra editorial...
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