1 comentario:

  1. Qué bárbaro el padre arrastrarla así por el pelo. Y Kasper, volviendo a terapia con el paragüitas atado a la maleta, mientras a Enigberg le crecía el pelo asombrosamente!, por suerte el perrito formó familia. Amo las coincidencias!, me encantó esta historia. Gracias!

    ResponderEliminar